En concreto han sido 50 las empresas y organizaciones que hoy y durante la jornada se han sumado a esta iniciativa y se han comprometido con el Pacto Mundial en la defensa de los Derechos Humanos, Laborales, Medio Ambiente y la Lucha Contra la Corrupción. Empresas como Mercadona, Consum, Cleop, Libertas 7, Baleària, Herbolario Navarro, Llanera; pymes como Inmerco Mk, AINFOR o Montaña Selección; empresas públicas como EMT; o asociaciones como Fevecta y AVE, son sólo algunas de las que hoy con este paso han avanzado en su compromiso con la ética en sus organizaciones.
Según Adela Cortina, “toda empresa tendría que sumarse, y a mayor poder mayor responsabilidad de hacerlo”. Pero esto no es sólo una cuestión de empresas privadas, sino que todos: “instituciones públicas, universidades, organizaciones empresariales y cívicas, deben dar este paso y comprometerse con los diez principios impulsados por Naciones Unidas”.
Para Cortina, Directora de ÉTNOR y Catedrática de Ética Empresarial, el Pacto Mundial significa más allá del compromiso, “ponernos de acuerdo en unas buenas prácticas que todo el mundo empresarial debería acordar, y ponerse de acuerdo también en difundir esas buenas prácticas para generar buenas empresas, que son para las sociedades un bien público, contagiando del buen hacer al resto de la sociedad”.
En su intervención Cortina ha destacado que este compromiso debe insertarse en la estrategia de la empresa, formar parte de su forma de ser y de hacer, y “además de hacerlo bien hay que comunicarlo para que sirva de ejemplo”. “Las empresas que asumen la ética como algo desde dentro están mejor gestionadas, y son más fiables para las gentes que quieran acercarse a ellas. La actividad empresarial se convierte así en una actividad capaz de generar riqueza, sumándose rentabilidad y virtud”.
Precisamente esta idea ha sido destacada por Francisco Pons, Presidente de Importaco, que ha resaltado la importancia de extender estos principios “como una mancha de aceite”. Muestra de ello es el compromiso que Importaco acaba de obtener de todos sus proveedores de hacerse firmantes del Pacto Mundial antes de 2014. Una cuestión fundamental teniendo en cuenta que el 90% de las compras de Importaco se hacen a nivel internacional.
En la jornada se han presentando también los casos de Bancaja y Secopsa como empresas ya adheridas al Pacto Mundial, quienes han destacado por encima de todo que “es una herramienta de mejora continua, que permite la gestión del control del riesgo, mejora la reputación, y facilita el diálogo con los grupos de interés”.
En conclusión y en palabras de Adela Cortina, hemos dado un paso importante en la Comunidad Valenciana, pero “hay que seguir luchando por que se sumen más empresas a esta iniciativa. Hay que poner las ventajas de la globalización al servicio de nuestros valores y respetar la dignidad de las personas. Es tiempo de construir sobre roca y no sobre arena, poniendo las empresas, universidades, instituciones políticas, al servicio de las personas porque no tienen precio sino dignidad, y hacer un mundo que este a la altura de lo que se merecen”.